NOVEDADES EDITORIALES DE ENERO
Carnaval es el nuevo título de una de las colecciones más vendidas del catálogo de la Galera, que incluye títulos como Los Reyes Magos, El Ratoncito Pérez, San Jorge y el dragón... Este título se incluye en una serie de álbumes ilustrados que enseñan a los más pequeños nuestra tradición y nuestra cultura de la manera más divertida. Además, estas historias se pueden compartir con toda la familia y son perfectas para los que empiezan a leer, gracias al estilo de letra manuscrita y las particiones de sintagma a final de línea.
El texto de Anna Canyelles, divertido y original, y las ilustraciones de Roser Calafell, tiernas y muy atractivas, combinan a la perfección y forman una pareja que gusta mucho a los niños y niñas. Con este libro nos cuentan la tradición de Carnaval, una fiesta en la que todos los niños y niñas se disfrazan y se lo pasan en grande. Lucía ya no es Lucía, es un hada. Y Teresa es Cenicienta. También hay robots, magos y vampiros. En Carnaval todo el mundo se divierte.
Anna Canyelles ha trabajado muchos años en el mundo de la edición, especialmente en libros escolares, y ha publicado algunos cuentos. Su vertiente pedagógica hace que los cuentos sean válidos para ser leídos a los más pequeños y también para que los primeros lectores se acerquen a nuestro legendario. Roser Calafell hace muchos años que ilustra. Para la Galera ha ilustrado numerosos cuentos, en especial la colección Mi mes, un longsellers de la Galera, con más de 180.000 ejemplares vendidos.
Las princesas también se tiran pedos de Ilan Bernman / Ionit Zilberman. Editorial Algar , 2010. Cartoné, 24,5×25,5 cm., 30 pp., 15,95 €.
Por Anabel Sáiz Ripoll.
No hay nada tan maravilloso para una niña como una princesa de cuento. Perfecta, impecable, bella. Nada parece perturbable. Vive por y para el escaparate. Ni come ni bebe ni siquiera va al lavabo. Es el modelo de perfección y también de aburrimiento.
Poco a poco se han ido trasgrediendo los tabúes principescos y nos hemos enterado, por ejemplo, de que las princesas también lloran; pero lo que no sabíamos es algo tan íntimo como que se tiran pedos. Y esa es la novedad del libro que estamos recomendando, Las princesas también se tiran pedos. El título ya invita a la sonrisa y, en algunos casos, puede ser tachado de irreverente, pero a los niños les encantará poder pronunciar la palabra pedo sin que nadie les advierta que esa “palabra no se dice”.
En el cuento, Laura le pregunta a su padre si son ciertos los rumores que circulan por el colegio de esa particularidad de las princesas. El padre investiga en sus libros y, juntos, descubren que es algo común y que princesas como la Cenicienta, Blancanieves o la Sirenita han tenido episodios de flatulencia que casi casi han cambiado el curso del cuento. Ahora bien, esa novedad, lejos de empañar la reputación de las princesas, las pone a la altura de las niñas, sus más fervientes admiradoras y les permite contemplarlas con nuevos ojos y sentirlas más cercanas.
El cuento escrito por Ilan Brenman y traducido por Josep Franco Martínez muestra que, en el fondo, todos nos igualamos porque todos tenemos unas mismas necesidades y unos mismos comportamientos. Muestra que no hay que hacer aspavientos ante algo tan normal como es tirarse un pedo. Seguro que los primeros lectores disfrutarán con la historia, sean niños o niñas, y se lo pasarán en grande imaginando a la Cenicienta en pleno ataque de pedos o Blancanieves envuelta en una nube tóxica que ella misma ha provocado.
Las ilsustraciones de Ionit Zilberman recogen la ternura de la historia y separan muy bien el plano real, formado por Laura y su padre, del plano imaginario, integrado por las princesas y el resto de personajes de ficción.
En definitiva, Las princesas también se tiran pedos, es uno de esos cuentos que demostrará a los pequeños que la lectura es divertida, aparte de mostrarles que la perfección no existe ni falta que hace.
Así te quiero mamá de Gabriela Keselman. Ilustraciones de Lucía Serrano. Editorial SM, colección Álbumes ilustrados, 2012. Cartoné, 48 pp., 14.70 euros. A partir de 6 años.
Por José R. Cortés Criado.
¿Qué no haría una madre por su retoño?
La mamá de esta historia es el prototipo de la mayoría de las madres, la que se descompone cuando no sabe dónde está su pequeño, la que consuela a su hijo cuando se hace daño, la que le aplaude cuando hace algo increíble, la que trata de darle todos los gustos, la que siempre tiene tiempo para escuchar a su niño, la que lo ve siempre guapo, la que lo tranquiliza cuando lo ve asustado…, en fin, la supermadre que está siempre al quite ante cualquier eventualidad bien para ayudar o dar un empujoncito para que algo suceda.
Si graciosa son las manifestaciones de cariño de la mamá, mayor ingenio tienen las imágenes que hablan por sí solas, basta con observar los rostros de la madre y del hijo para comprender el texto, el lenguaje expresivo de sus caras es inequívoco.
La ilustradora, Lucía Serrano ha buscado el fondo blanco para siluetear sobre él las imágenes de las personas, animales y cosas que componen el escenario de la obra; y sobre esos dibujos en blanco y negro de las dependencias de la casa, del parque o de la calle aparecen dibujos infantiles, propios de un neolector que pinta sobre el suelo, paredes o mesas sin importarle el dibujo de fondo.
La mezcla de texto y dibujos son buenas y crean una atmósfera entre real y fantástica que envuelve a esta solitaria mamá y su vástago, ya que en ningún momento se hace referencia a la figura masculina.
Libro divertido, ameno que nos saca al lector adulto más de una sonrisa cómplice; seguro que a los pequeños lectores les encanta.